Ø Porque vamos a perder un ecosistema vegetal donde numerosas especies sobreviven adaptadas al corto ciclo de las periódicas inundaciones.
Ø Porque la Bahía Redonda es quizás el único humedal argentino, y uno de los pocos del mundo que alcanza su nivel máximo a finales del verano y su mínimo a fines de invierno.
Ø Porque si se eleva su nivel, la Bahía Redonda no podrá ser más la escala de descanso y alimentación de muchas aves que la utilizan en sus ascensos y descensos migratorios.
Ø Porque no estarán más todas las especies costeras ( playeritos, chorlitos, pitotoys, becasinas de mar)… que necesitan de sus costas húmedas y planas para alimentarse.
Ø Porque elevar el nivel de agua dificultará la supervivencia de todas aquellas especies que por no ser buceadoras, necesitan alimentarse desde la superficie: cisnes de cuello negro, coscorobas, patos, flamencos…
Ø Porque en un mundo que cuida cada vez más sus humedales, y en algunos casos y a grandes costos recupera los que ha perdido, nosotros nos damos el lujo de destruir un espacio único, para convertirlo probablemente en una cloaca a cielo abierto.
Ø Porque a cambio de un desierto de agua, se va a destruir un paisaje dinámico y cambiante en cada estación del año, de una biodiversidad admirable para nuestros visitantes.
Ø Porque si en invierno se mantienen niveles de agua superiores a los naturales, será más difícil que se escarche y cuando lo haga, el patín, o cualquier otra actividad sobre hielo será más peligrosa que hasta ahora.
Ø Porque no sabemos de ningún EIA ( Estudio de Impacto Ambiental ) que haya reflexionado sobre los temas anteriores.( art.73 Constitucion Pcial-Ley Pcial.2658)
Ø Porque todavía nadie nos explicó las razones de una obra tan costosa y faraónica con fondos nacionales cuando “Argentina requiere atender y reducir considerablemente sus todavía acuciantes problemas sociales, lo que significa importantes inversiones en la salud pública, la vivienda y la educación” .[1]
Ø Porque la Bahía Redonda es quizás el único humedal argentino, y uno de los pocos del mundo que alcanza su nivel máximo a finales del verano y su mínimo a fines de invierno.
Ø Porque si se eleva su nivel, la Bahía Redonda no podrá ser más la escala de descanso y alimentación de muchas aves que la utilizan en sus ascensos y descensos migratorios.
Ø Porque no estarán más todas las especies costeras ( playeritos, chorlitos, pitotoys, becasinas de mar)… que necesitan de sus costas húmedas y planas para alimentarse.
Ø Porque elevar el nivel de agua dificultará la supervivencia de todas aquellas especies que por no ser buceadoras, necesitan alimentarse desde la superficie: cisnes de cuello negro, coscorobas, patos, flamencos…
Ø Porque en un mundo que cuida cada vez más sus humedales, y en algunos casos y a grandes costos recupera los que ha perdido, nosotros nos damos el lujo de destruir un espacio único, para convertirlo probablemente en una cloaca a cielo abierto.
Ø Porque a cambio de un desierto de agua, se va a destruir un paisaje dinámico y cambiante en cada estación del año, de una biodiversidad admirable para nuestros visitantes.
Ø Porque si en invierno se mantienen niveles de agua superiores a los naturales, será más difícil que se escarche y cuando lo haga, el patín, o cualquier otra actividad sobre hielo será más peligrosa que hasta ahora.
Ø Porque no sabemos de ningún EIA ( Estudio de Impacto Ambiental ) que haya reflexionado sobre los temas anteriores.( art.73 Constitucion Pcial-Ley Pcial.2658)
Ø Porque todavía nadie nos explicó las razones de una obra tan costosa y faraónica con fondos nacionales cuando “Argentina requiere atender y reducir considerablemente sus todavía acuciantes problemas sociales, lo que significa importantes inversiones en la salud pública, la vivienda y la educación” .[1]
[1] Extraído del 2da Comunicación Nacional de la República Argentina a la convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático- pag. 26.”Obstáculos y condicionantes para la adaptación y mitigación”
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